¡Buenos tardes!
Mi nombre es Valentina Esquivel de Tokyo Consulting Firm.
Ser una empresa altamente productiva dependen de muchos factores, entre ellos y el más importante son nuestros empleados.
La productividad depende de un ciclo interno en cada organización, en el que dependen, los empleados, la empresa y el cliente. El objetivo común es ofrecer un servicio de calidad, pero ¿Qué pasa cuando el objetivo de nuestro empleado es sólo el salario? ¿Qué pasa si en realidad nuestros empleados no se sienten motivados en el trabajo? El ciclo se rompe.
La solución al problema es compleja pero bien retribuida, evaluar a nuestro empleado. ¿Por qué es importante los sistemas de evaluación? En primer lugar, es importante que la empresa de a conocer los objetivos que quiere alcanzar como organización y las estrategias de cómo lograrlo. Ha pasado en muchas ocasiones, que el empleado no sabe el motivo de estar en la empresa, ni cuales son sus responsabilidades, o que necesitamos de él para que la organización crezca. Tan sencillo como compartir esta información, ayudarán a que el empleado encuentro el motivo para estar en la empresa y no sólo trabajar por trabajar.
Una vez que nuestros empleados conocen los objetivos y estrategias, es importante apoyarlo a que descubra sus capacidades y que siga mejorando progresivamente. El cerebro libera cantidades considerables de dopamina al sentir que tuvo un logro. Esto estimula la sensación de bienestar y satisfacción en cada persona, lo que produce un sentimiento de motivación y gusto por repetir la actividad a realizar. ¿Cómo podemos lograr que nuestros empleados se sientan realizados y liberen dopamina? Es importante mostrarles un sistema en el que propongan estrategias personales, que haya un periodo de retroalimentación y al final un resultado que sea cuantificable.
Dependiendo de los resultados arrojados pro cada empleado es como podremos ayudarlos a motivarlos o a hacer ajustes en su trabajo para poder ser más eficaces y eficientes.
Lo que nos cuenta la paradoja del agua y del diamante es que, buscamos a personas que sean tan raras y especiales como un diamante, pero a la vez que sean necesarias como el agua, buscamos encontrar el punto medio entre ambos extremos. El empleado que se encuentra en este punto medio y que, además, encuentre la motivación y el compromiso de trabajar en nuestra organización es el que llevará a la empresa a encontrar su valor agregado, subsecuentemente, hará a la empresa altamente efectiva.
Gracias por leerme.
